¿En qué casos se recomienda la sedación con óxido nitroso?

¿En qué casos se recomienda la sedación con óxido nitroso?

Como ya dijimos en el artículo anterior, la administración de óxido nitroso está recomendada en todos aquellos pacientes que declaren sufrir episodios de estrés y ansiedad durante la consulta del dentista, e incluso ante la idea de acudir a la misma.

Pero, además, existen otras condiciones en las que el empleo de la sedación con óxido nitroso está especialmente recomendada. En primer lugar, la sedación con óxido nitroso es una solución habitual en odontopediatría.

 Los niños son un claro ejemplo de pacientes proclives a padecer odontofobia y, por este motivo, no suelen cooperar durante el tratamiento. Para estos casos, la inhalación de este gas durante la cita está recomendada en niños de más de 4 años de edad.

Paciente pequeño sedado con óxido nitroso

Además, esta técnica de sedación es habitual en pacientes que padecen algún tipo de discapacidad psíquica o en personas de edad avanzada que han visto mermadas sus capacidades cognitivas. Estos pacientes suelen tener grandes niveles de estrés ante la visita al dentista y gracias a la inhalación de óxido nitroso, se sentirán cómodos a lo largo del tratamiento y permitirán que el especialista trabaje con comodidad.

¿Qué beneficios tiene este tipo de sedación?

La sedación con óxido nitroso es un procedimiento completamente inocuo que tiene beneficios tanto para el paciente como para el odontólogo que aborda el caso.

En primer lugar, es una solución rápida y sencilla para aquellas personas que padecen odontofobia. Gracias a esta técnica de sedación, los niveles de estrés y ansiedad sufridos en otras ocasiones se reducen de manera considerable.

Óxido nitroso en la odontología

En segundo lugar, la sedación con óxido nitroso también es un alivio para el especialista, ya que podrá trabajar con mucha más comodidad con estos pacientes, garantizando con mayor seguridad el resultado del tratamiento.